viernes, 14 de marzo de 2014

Curso Bíblico Avanzado

Lección 5
La vida diaria
Hay personas que dicen que no creen que hay que "mezclar la religión y los negocios". Quieren tener a la religión guardada dentro de límites muy estrechos. Eso no puede hacerse con el cristianismo. El cristianismo se relaciona con todas las actividades de la vida, 24 horas al día, 7 días de la semana.
1. La aspiración general de la vida cristiana
El cristianismo es una forma positiva de vida. Prohibe algunas cosas, pero la fuerza principal del cristianismo estriba en que no se funda en lo que dice que no hay que hacer, sino en lo que hay que hacer.
La aspiración del cristiano es imitar en todo la vida de Cristo (1 Pedro 2.21; Filipenses 2.5 y 1 Corintios 11.1). Indudablemente esta es una razón por la que se nos dieron cuatro libros de la Biblia que habla de la vida de nuestro Señor Jesucristo.
Otra manera de expresar esta aspiración se encuentra en Filipenses 1.20. Debemos "magnificar" a Cristo. Magnificar algo es acercarlo más hacia la persona que lo ve, para que se vea más grande. Las gentes podrán ver mejor a Jesús si lo contemplan en la vida de los cristianos. Pregúntese si está usted "magnificando" a Cristo con su vida, o si, por el contrario, lo está usted escondiendo de los demás.
Vemos por tanto, que los cristianos son como espejos que reflejan al Señor para que el mundo entero pueda verlo. También somos como luces que brillan en un mundo sumido en tinieblas. Nuestra luz es nuestra semejanza con Cristo - un carácter como el de Cristo (Proverbios 20.27; Mateo 5.14; también Filipenses 2.15).
2. La vida cristiana con respecto a varias relaciones
Cuando una persona se hace cristiana, todo cambia en su vida (2 Corintios 5.17). A fin de ayudarnos a ser como Cristo, la Biblia nos enseña nuestros deberes para con Dios, en todas las relaciones importantes de nuestra vida. Estudiemos algunas de ellas.
1. Los padres. El cristianismo afecta esta relación. Para los jóvenes cristianos que viven en su hogar con sus padres, se dan los siguientes mandamientos: Efesios 6.1-3 y Colosenses 3.20. El mismo Jesús puso el ejemplo y podemos verlo en Lucas 2.15. Cuando los hijos salen de su hogar paterno, aún se espera que honren a sus padres. Esto significa que deben seguir respetándolos y cuidando de ellos cuando así lo necesiten (1 Timoteo 5.4,8,16).
2. El gobierno. Aún cuando la Biblia no hace ninguna recomendación acerca de la clase de gobierno que debe tener cualquier nación, sí enseña sobre los deberes del cristiano bajo el gobierno donde le corresponda vivir.
Debemos pagar los impuestos (Mateo 22.17-21; Romanos 13.6,7).
Debemos mostrarnos respetuosos con los gobernantes (1 Pedro 2.17).
Debemos orar por nuestros gobernantes (1 Timoteo 2.1-3)
Debemos obedecer las leyes (Romanos 13.1-5, 1 Pedro 2.13-15).
Los cristianos obedecen las leyes sin temor de que les encuentre violándolas. La única forma en que el cristiano puede desobedecer las leyes es cuando éstas van en contra de nuestra obediencia a Dios (Hechos 4.18-20; Hechos 5.29).
3. En nuestro trabajo. Se nos ordena que debemos trabajar si no estamos físicamente imposibilitados para ello. (2 Tesalonicenses 3.10-12; 1 Tesalonicenses 4.11,12). Hay instrucciones en la Biblia tanto para los patrones como para los empleados, y pueden verse en: Efesios 6.5-9; Colosenses 3.2213; Colosenses 4.1 y 1 Pedro 2.18.
4. Casamiento y hogar. De acuerdo con Mateo 6.33, debemos poner ante todo al Reino de Dios. Al hacer planes para casarse, los cristianos deben buscar compañero o compañera que sea una ayuda para vivir la vida cristiana. El compañero de una persona tiene mucha influencia en la vida de ella, y uno que no tenga interés en esta vida, puede hacer que el cristiano se vuelva frío o alejado de la vida cristiana.
Los cristianos deben comprender que el casamiento es algo permanente. Aún en los casos en que las leyes civiles permitan fácilmente el divorcio, según el cristianismo, el divorcio y el contraer nuevamente matrimonio son pecaminosos, a menos que existan las razones que Cristo dio, que pueden justificar el divorcio (Mateo 19.9).
Algunos de los deberes de la esposa cristiana pueden encontrarse en 1 Pedro 3.1-6; Colosenses 3.18, Efesios 5.22 y Tito 2.4,5.
Algunos de los deberes del esposo cristiano se encuentran en 1 Pedro 3.7; Colosenses 3.19 y Efesios 5.25.
5. Los hijos. Los deberes de los padres cristianos están citados en: Efesios 6.4; Proverbios 22.6; Colosenses 3.21 y 2 Timoteo 3.14,15. El más importante de todos los deberes es enseñar a los hijos la voluntad de Dios. En esto se incluye el darles buenos ejemplos. El padre que no sepa hacer su deber en relación con este renglón, pierde el derecho de ser elegido para diácono o anciano de la iglesia (1 Timoteo 3.4,5,12). El ejemplo de Samuel en el Antiguo Testamento nos enseña cómo se pierde la influencia sobre los demás cuando no se educa bien a los hijos (1 Samuel 18.1-5).
6. El mundo. Los cristianos debe ser diferentes de los demás (Romanos 12.1,2; 1 Pedro 2.11,12). Esta diferencia estriba en la forma de vida y en los altos niveles de la moral. Los cristianos deben aprender a resistir la tentación que encierra la expresión: "todo el mundo lo hace". El pecado de "mundanalidad" es aquella condición en la que los cristianos viven una vida igual a la que viven los que no son cristianos.
7. Los enemigos. Hasta el mismo Jesús fue maltratado y tuvo enemigos. Probablemente usted, como cristiano, también los tendrá. ¿Cómo tratar a los que nos ofenden? Romanos 12.18-21 nos da la respuesta. El ejemplo del mismo señor Jesús lo encontramos en 1 Pedro 2.23. Es muy difícil de seguirse, pero es una parte de la vida diaria del cristiano (Mateo 5.43-48).
8. Conversación. Hasta la forma de hablar del cristiano cae bajo la ley de Cristo. Debemos controlar nuestra lengua. Santiago 1.26: esto incluye el evitar usar palabras profanas o maldecir. Mateo 5.33-37: evitar conversaciones necias o sucias. Santiago 4.11: se nos prohibe murmurar del prójimo y mentir. Estudie Colosenses 4.6 y 1 Timoteo 4.12 en este respecto.
9. Cuidado del cuerpo. Aun cuando éste no es de importancia primordial, sí es importante (1 Timoteo 4.8); esto se debe a que el cuerpo es el templo del Espíritu Santo (1 Corintios 6.19). El cuerpo no debe hacer nada que creamos que Cristo no quiere que hagamos. Su espíritu mora en nosotros y por eso debemos comportarnos con toda limpieza y rectitud (1 Corintios 6.13-15).
Testimonio personal
1. ¿Desea usted con toda sinceridad imitar a Jesús?
2. ¿Cree usted que su deber para con Dios está en primer lugar antes que su deber para con el gobierno, si llegan a estar ambas cosas e conflicto?
3. ¿Trata usted de preguntarse "¿Qué haría Jesús" más a menudo cuando toma alguna decisión?
4. ¿Es usted de los que creen que la religión debe mantenerse separada de la vida diaria?

5. ¿En realidad está usted tratando de devolver siempre bien por mal?

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