EL PRIVILEGIO DE SERVIR EN LA ADORACION
Es un privilegio muy hermoso poder participar en
los actos de adoración, especialmente cuando nosotros
los estamos dirigiendo. Es algo hermoso porque estamos sirviendo a nuestro Padre Celestial; al Creador de los cielos y la tierra
(Génesis 1:1; Salmos 19:1; 33:6; Romanos 1:19-20). Nuestra conciencia
estará tranquila cuando hemos participado en la
adoración de una manera aceptable, es decir, como Dios manda en Su Palabra.
0 comentarios:
Publicar un comentario